24/3/14

De Doulas y Mujeres

La Doula es la persona que asiste tu parto de forma emocional. Ella brinda apoyo emocional y físico, aunque su labor nada tiene que ver con el trabajo de un obstetra, partera o enfermera. La misión de la doula es informar sobre la experiencia de la maternidad y el alumbramiento. Su trabajo se basa en un continuo soporte emocional y confianza durante éste  proceso, lo que mejora y facilita las fases de la maternidad. 

"Hay estudios que han demostrado que el apoyo emocional de la doula a la familia tiene beneficios durante el parto, tales como reducción en un 50% de cesáreas, un 40% en uso de fórceps, un 60% del uso de epidural o que acorta en un 25% la duración de los partos. Todo esto, por supuesto, como complemento a una buena asistencia sanitaria (“A Doula Makes the Difference” por Nugent, Mothering Magazine, March-April 1998)."


Las funciones de una Doula:

Trabajo de parto

  • Ayuda a la madre a manejar el dolor de parto mediante métodos naturales como respiración, masaje, cambios de respiración y técnicas de relajación.
  •  Responde dudas y da ánimo.
  • Mantiene informados a la madre y familiares sobre los procesos y avances en el parto.
  • Apoya las desiciones de la madre referente a todo lo relacionado con su alumbramiento.
  • Atiende cualquier necesidad de la madre en el trabajo de parto.
  • Ayuda a mantener un ambiente cómodo y adecuado para la madre.
  • Respeta la privacidad de la mujer durante su proceso de parto.
Posparto
  • Facilita el establecimiento temprano de la lactancia materna.
  • Ayuda con los cuidados básicos del bebé
  • Ayuda con el cuidado de heridas y apoyo emocional.
Con el apoyo de una doula no sólo cubres los puntos anteriores sino que también existen diferencias excepcionales en el inicio de tu maternidad, como:

  • 50% reducción en cesáreas
  • 25% parto más corto
  • 60% menos peticiones de epidural
  • 40% menos uso de oxitocina sintética
  • 30% menos uso de analgésicos
  • 40% menos uso de fórceps
  • Mejora el vínculo padres-bebé
  • Menos problemas con la lactancia
  • Menor incidencia de depresión posparto
"La doula busca el fortalecimiento de los dones de la mujer a la que acompaña, no su sombra. Busca que ella se sienta (diosa) madre, le recuerda lo que ya lleva impregnado en sus células: que sabe parir y criar como lo hicieron todas las mujeres la precedieron. La doula le recuerda a la madre su conocimiento ancestral. Estamos ahí para eso: para ayudar a recordar, sólo eso. Somos un espejo donde queda reflejado un conocimiento ancestral."

21/3/14

Niños "transicionales"

Actualmente nuestro mundo está sumergido en la comodidad y en el poco esfuerzo para hacer las cosas, nos vemos cada ves más alejados de las condiciones necesarias para sentir el amor puro. 
Al instante del alumbramiento los bebés son alejados de sus madres, sin importarles el sentimiento de soledad y abandono que puedan estar viviendo, cuando lo único que necesitan para comenzar la vida es seguridad y confianza y ésto sólo se logra estando a lado de su madre. De esta forma se lastima el vinculo afectivo entre ambos, ese bebé al crecer, lo más probable es que desarrolle problemas para vincularse en sus relaciones afectivas y/o sociales.
La tecnología ha llegado a nuestras vidas a sustituir los vínculos afectivos, desde pequeños obligamos a los niños a apegarse a cualquier objeto (cobijita, peluche...) que a sus semejantes, nos resulta más cómodo que atenderlos, no queremos que "nos molesten" pero no nos damos cuenta de que el contacto físico y emocional permanentes es una necesidad primaria del recién nacido. 

Laura Gutman dice: "Ninguna otra especie de mamíferos pretendería algo tan insólito de su propia cría. Pero para los humanos es común determinar que lo mejor es “dejarlo llorar”, “que no se mal acostumbre” o “que no se vuelva caprichoso”. Y nos resulta totalmente habitual que el cuerpo del niño esté separadoSolo en su cuna. Solo en su cochecito. Solo en su sillita."

El objeto transicional es un refugio del niño ante la falta de atención, de muestras de cariño, de contención, es la medicina del niño invisible a sus padres. Éste objeto se vuele tan importante en la vida del niño que representa el apego que siente con sus padres ayudándole a superar la ansiedad de separación. Es el vínculo que le otorgará seguridad, confianza y tranquilidad; esta virtud debería ser aportada por papá o mamá, ellos deberían estar presentes en sus momentos difíciles, en sus debilidades y errores, deberían ser ellos el lugar de soporte y paz, no un objeto inerte y falto de sentimientos. 

Que el niño se vincule emocionalmente con algo, no quiere decir que vaya a desarrollar algún tipo de trastorno pero pensemos claramente: Un ser humano necesita de alguien que lo escuche, lo entienda y lo apoye, especialmente si se trata de un niño que su mundo gira en torno al amor de sus padres. Ellos no buscan cosas materiales, buscan nuestra cercanía. 

Recurrir a ésto no debería ser problema, lo malo aquí es cuando se sustituyen las caricias, el olor a mamá, los abrazos y el cariño en un peluche, en una cobija, en un muñeco. Son abandonos silenciosos, violencias calladas.

"Casi todos los niños están enfermos de soledad. Pero los adultos no reconocemos en la enfermedad del niño, la necesidad desplazada de contacto y presencia."

Sembremos en los corazones de nuestros hijos semillas de esperanza. Un día cuando sus necesidades emocionales sean satisfechas, no necesitarán tanto de nosotros, ahora es el momento. Tomemos responsabilidad y consciencia. Nuestros hijos nos necesitan ahora, nada puede remplazar el amor que les estamos negando. Abramos los ojos a los niños invisibles. 


19/3/14

¿Jugamos a Competir?

Desde nuestra niñez hemos sido bombardeados con la horrorosa tendencia de competir, que si el hijo del vecino durmió de tirón a los 6 meses y el nuestro no, que la hija que la prima caminó al año y nuestro hijo todavía no camina, que el primito ya habla y a nuestro hijo no se le entiende... y así podría nombrar un sin fin de comparaciones que terminan en competencia. ¿Que es lo malo de esto? Que dejamos de ser valorados por lo que somos y nuestros padres, que son nuestra máxima figura, nos empiezan a "medir" por lo que hacemos. 
Si no logramos desprendernos de esta cadena, nos acompañará a lo largo de nuestra vida, volviéndonos adultos infelices, insatisfechos con nosotros mismos, buscando incentivos externos para sentirnos bien y obviamente con una baja autoestima. Al final de cuentas siempre habrá alguien que haga mejor que nosotros alguna cosa y estarnos comparando sólo nos traerá mas desdicha. 
"Siempre va a haber alguien con más dinero, más delgado, más rápido, más rico, socialmente visto como más hermoso, más triunfador, más inteligente, etc. Somos siete mil millones de seres humanos; competir contra este ingente número de personas es absurdo."
La competencia en cierto modo es buena, pero me refiero a competir con nuestras propias sombras, a quitarnos malos hábitos, a mejorar y crecer humanamente, desprendernos del ego y la banalidad. Si desde niños fuéramos amados y valorados según nuestro Ser, a ser respetados nuestros ritmos de evolución y desarrollo, sin ser presionados (incluso por las personas que mas amamos, nuestros padres) comparados y rechazados, hoy en día existirían mas adultos seguros de sí mismos, dispuestos a cooperar, más empaticos con sus semejantes y sobre todo más felices.
Tristemente el humano es valorado por lo que hace y no por lo que es. Desde que nacemos somos seres únicos y especiales, con nuestros talentos, virtudes y habilidades propias ¿Por qué compararnos con otros talentos, virtudes y habilidades ajenas? Ya lo dijo Albert Einstein "Todos somos genios. Pero si juzgas a un pez por su capacidad de escalar árboles, vivirá toda su vida pensando que es un inútil"

Es importante comprender que la competencia no es necesaria en la vida, lo que sí es importante es el crecimiento personal, tampoco quiere decir que estamos criando niños en una burbuja artificial en un mundo competitivo, al contrario, estamos forjando personalidades que creen que un error no es un fracaso sino una nueva oportunidad de aprender y evolucionar, estamos enseñando a afrontar frustraciones y la capacidad de solucionar problemas. Debemos dejar claro que todos cometemos fallos y eso no nos hace mejores o peores personas, que unos hacen mas rápido o mas lento algo y eso no significa que sea bueno o malo.


Dejemos el mejor legado a nuestros hijos el entendimiento del verdadero valor humano, desprendamos la cadena del "mas" y "mejor" que lo único que hace es crear una sociedad infeliz y enfermiza. 
"La infancia no es una carrera para ver lo rápido que un niño puede leer, escribir y contar. Se trata de una pequeña ventana de tiempo para aprender y desarrollarse al ritmo que sea adecuado para caada niño en particular. Antes no es mejor" Magda Gerber

18/3/14

Miedos infantiles

La mayoría de los miedos que se sufren en la infancia suelen ser inducidos por el ambiente externo que resulta desconocido o bien por una mala experiencia vivida en el hogar. Existen miedos "normales" que forman parte del desarrollo emocional del niño, es importante que estos miedos no se repriman ni se minimicen pues solo harán que empeore.

Edades Miedos
0 a 1añoLlanto ante estímulos desconocidos 
2 a 4 añosTemor a los animales
4 a 6 añosTemor a la oscuridad a las catástrofes, y a los seres imaginarios (monstruos y fantasmas)
6 a 9 años Temor al daño físico o al ridículo por la ausencia de habilidades escolares y deportivas
9 a 12 años Miedo a los incendios, accidentes, a contraer enfermedades graves. Aparecen temor a conflictos graves entre los padres o al mal rendimiento escolar.
12 a 18 años Temores relacionados con la autoestima personal (capacidad intelectual, aspecto físico, temor al fracaso) y con las relaciones sociales.

Lo habitual es que vayan desapareciendo a medida que el niño crece, es un proceso evolutivo ya que contiene un alto valor adaptativo. A pesar de ésto existen algunos factores externos que alientan a que surja un miedo por ejemplo los patrones familiares, es decir, cuando los padres transmiten su miedo a los hijos en situaciones que no denotan peligro. Otro de ellos es la información negativa, esto es, cuando una información se da de manera exagerada y crea una percepción turbia. Existe también el de aprendizaje directo, cuando una experiencia ha causado el temor.
Dicho ésto, podemos tener una perspectiva mas abierta del miedo de nuestro hijo, pero ¿Cómo ayudarlos a superarlo?

  1. Analizar el tipo de miedo.
  2. NUNCA negar el miedo. No podemos poner en duda su sentimiento, no se debe minimizar aunque para nosotros no signifique nada.
  3. Empatizar y dar seguridad.                                                                                                                  -"Tienes miedo al perro porque la otra ves..." Y narramos la historia.
Nuestra compañía y actitud que tomemos a la hora de ayudarlos les dará confianza para poder superarlo de manera saludable. Tengamos en cuenta que muchas veces lo que hacemos es crear otro un segundo miedo, por ejemplo "No debes tener miedo, es una tontería, tan solo es un payaso, no seas ridículo" Ahora no sólo le tiene miedo al payaso, sino también tendrá cuidado de "no tener miedo" frente a nosotros, de "ser fuerte" y ese es un temor a las aprobaciones de sus padres.
Tampoco debemos utilizar historias como "Si te portas mal, el ropavejero vendrá por ti" sólo para lograr obediencia. 
Los niños necesitan ser escuchados y comprendidos, es en los momentos difíciles donde forjamos la confianza pa/madre-hijo, es en nosotros donde serán contenidos en sus debilidades, reforcemos esta seguridad. No se trata de endurecer su corazón sino de acompañarlos con empatía, respeto, paciencia y mucho amor. Nadie quiere hijos indiferentes a la existencia del otro, entonces no seamos así con ellos. 


13/3/14

¡¡No tengo prisa por crecer!!

Este niño habla demasiado, tendría que ser mas silencioso. Este niño habla poco, tendría que ser mas hablador. Este niño juega poco, tendría que jugar mas. Este niño es muy movido, tendría que estarse más quieto. Haga lo que haga parece que está mal, que tiene que acabar siendo el niño estándar que hace exactamente la mitad de todo.

Carlos González. 



A veces pareciera que los adultos jugamos competencias con el vecino, la prima, la amiga... para ver cual de nuestros hijos hace mejor las cosas. Esta necia actitud de competencia hace niños desenfocados, que siempre están buscando nuestra aprobación, si ganan se sienten queridos y si no ganan sienten que nos han decepcionado. Este comportamiento muchas veces lo alentamos inconscientemente: con las comparaciones, con nuestra actitud ante un acto fallido, presionándolos para que hagan alguna cosa y un largo etc. Nuestros hijos se sienten desaprobados por las personas más importantes en sus vidas. Lamentablemente esta lucha hace que se sientan bajo presión y su inocencia decae, su infancia se va apagando.

La infancia no es una carrera que hay que ganar, cada niño tiene su propio ritmo y cualidades, aprenden a distintos tiempos pues cada cuerpo, cada mente y cada corazón son distintos. Pero nos olvidamos que son niños y que están viviendo con todo lo que esto implica: Llantos, miedos, risas, gritos de alegría, necesidades a "deshoras", etc.
A los niños no les queda claro la famosa frase "Te portas bien" ¿Que es portarse bien? Ellos hacen sus cosas por su naturaleza de alma libre, se están desarrollando, creciendo, aprendiendo, no saben de modales ni reglas sociales, ellos viven su momento. Tratemos de cortar lo menos posible sus alas de alegría y libertad. Cuando crezcan irán entendiendo, de a poco, en que lugares hacer ciertas cosas, a esperar cuando mamá o papá estén hablando con otra persona, a no gritar cuando alguien duerme, a quedarse sentados en la mesa durante tiempos mas largos, pero todo esto con el tiempo; cuando vayan madurando. 
Mientras esto pasa seamos tolerantes y respetemos sus tiempos, dejémoslos expresarse y mientras no hagan cosas que dañen a alguien, demos la libertad de tocar, reír, gritar, pintar... si el niño quiere pintar las paredes podemos ofrecer pintar sobre una cartulina pegada en la pared, si el niño quiere tirar tierra ofrecemos la alternativa de jugar en el patio... me refiero a que podemos guíar sus intereses de forma mas respetuosa, sin decir tantas veces "No", "Comportate", "Eso no se hace", solo se es niño una vez, dejemos que vivan su etapa intensamente. Son niños, no adultos pequeños.
Cuando una infancia ha sido vivida sanamente se convierten en adultos seguros, con autoestima fuerte, dispuestos a ayudar y cooperar con sus semejantes, son amables y tranquilos. Para el mundo del mañana se trabaja hoy, en nuestro hogar, con nuestro hijos.

Que diferente fuera todo si no viviéramos con el agobio de querer quedar bien con los demás y por un momento comprendiéramos que nuestros hijos nos necesitan y mucho mas que el vecino, la amiga o la prima, este es el primer paso para educar con respeto.

"Sostenemos en nuestros brazos a los adultos del futuro. Un mundo mejor es posible. Comencemos ahora"


12/3/14

Nuestro niño interior se convierte en adulto

¿Que pensaría de ti el niño que fuiste del adulto que eres ahora?

Cuando nos convertimos en padres suele ser la experiencia mas maravillosa de nuestras vidas, todo parece mágico, pero conforme va pasando el tiempo y el niño va creciendo el camino parece tornarse largo. Nuestra paciencia se agota, los gritos salen disparados por la casa, el pellizco, el insulto, la nalgada se han vuelto tan cotidianos... ¿A donde se fue la magia? 

Quiero hablar en nombre de los niños, de esas voces que apenas saben lo que está pasando, que únicamente sienten dolor, abandono, humillación, coraje. Se les han cortado sus alas, su niñez, su vitalidad y alegría que solo la infancia puede dar de forma limpia y natural. Quiero hablar en nombre de los niños escondidos entre las sombras porque el maltrato mas triste es el que se da por parte de los padres, de quien nos ha dado la vida. Sí, quiero hablar en nombre de esos niños que viven dentro de nosotros los adultos. De ti y de mi. Porque solo cuando nos sanemos de esas heridas, fruto de la ignorancia, podremos llevar a nuestros hijos por el camino de la crianza respetuosa. 

Ya sea en mayor o menor medida, la mayoría de nosotros -los adultos- hemos sufrido violencia emocional o física por parte de nuestros padres. Pero el problema aquí es que creemos que no ha pasado nada, que somos adultos íntegros. Algunos hasta llegan a pensar que sin eso hoy no serían nada. Bueno, pues detengámonos a pensar un momento en cuanta gente allá afuera está ahogándose en drogas a causa de un abandono infantil, de la poca paciencia en las calles, de la prepotencia, el jefe que le gusta humillar a sus empleados, los profesores insultando a los niños. ¿De donde creemos que viene todo este maltrato?

A veces cosas tan importantes para ellos pasan desapercibidas por nosotros, como imitar su forma de hablar, burlarnos de su incapacidad para hacer o decir algo, despreciar sus limitantes de niños, y un largo etc. suelen ser situaciones donde ellos necesitan de nosotros y de nuestro apoyo y a cambio respondemos de esta forma que sinceramente es mal gusto. Pero eso sí, les enseñamos otro tipo de "modales" decir gracias y por favor, "comportarse" en la casa del amigo... estamos perdiendo de vista lo que realmente importa y lo que realmente necesitan los niños, lo que de verdad los harán personitas especiales y llenas de amor al mundo.

Intentemos cambiar las cosas, por lo menos para esos seres tan preciados que son nuestros hijos. 
Lo que los niños reciban se lo darán al mundo. A lo mejor nos cueste trabajo comenzar, pero reconocer es el primer paso. Tampoco se trata de ser perfectos sino de desprendernos de esa cadena de violencia y crear una nueva, construida desde el amor y el respeto. 

Pam Leo dijo. "Criemos a niños que no tengan que sanarse de su infancia" 




6/3/14

Por un Parto Consciente.

La vida inicia en la concepción, pero la forma en que nacemos determina mucho sobre nuestro futuro. 
Muchas veces cuando una madre esta a punto de dar a luz, deja en manos del médico todo lo relacionado con el parto, claro, él tiene el titulo de profesional. ¿Pero quien podrá decirle a una mujer lo que su propio cuerpo le esta diciendo? Necesita conectarse con lo que está sintiendo, con su instinto y su bebé. Las decisiones que se tomen en torno al parto deben ser tomadas por la misma madre, es su derecho.

Para llevar a cabo un parto respetado, primeramente la mujer debe informarse, leer, educarse sobre lo que esta pasando con su cuerpo y su embarazo. Lo que puede y no pasar durante el parto. Es su derecho estar acompañada por quien ella sienta conveniente (mamá, doula, pareja, hijos, amigas, etc) crear un ambiente relajante y de confianza (música, luz tenue, aire libre, etc) tener la libertad de hacer lo que su cuerpo le pida (acostarse, caminar, tomar un baño, etc) este acontecimiento es trascendental, por tanto cada decisión que se tome debe ser con el consentimiento de la madre y el profesional de salud deberá explicar cada intervención y el por qué es necesario.
La aceleración del parto no debe ser permitida, el cuerpo y la naturaleza son sabios, lo mejor es escuchar las señales y hacerles caso. La madre debe sentirse segura al saber que sus deseos serán tomados en cuenta como prioridad, nadie deberá de presionarla sobre ninguna intervención como la epidural, los constantes tactos o la cesárea ( a menos que ésta sea necesaria) pues únicamente ella sabe lo que está sintiendo y viviendo. Este instante es intimo, dejemos que ella se conecte con su naturaleza.
Ella podrá parir de la forma que crea adecuada (parada, en candelillas, hincada, etc) y en el lugar que ella se sienta más cómoda.
"La posición tumbada boca arriba es poco elegida por la mujer que está pariendo. La mencionan como incómoda y dolorosa. Es considerada como anti-fisiológica, ya que disminuye el espacio por donde deberá pasar el feto al nacer. No existe un solo mamífero en el mundo que adopte esta posición de manera espontánea para parir a menos que sea obligado como lo es la mujer cuando los médicos le dicen que así debe parir porque es más cómodo debe parir porque es más cómodo (por supuesto para los médicos, no para ella)."
Si tu estas embarazada o conoces a alguien que lo esté, pasa ésta información. 
El nacimiento es un acontecimiento cargado de energía, amor y espiritualidad. Desgraciadamente estamos acostumbrados a verlo como un trámite más en nuestras vidas, estamos perdiendo el rumbo. El momento del parto influye considerablemente en la mujer como en el bebé. La seguridad, confianza y apoyo que se tenga durante este instante es crucial. Éste puede repercutir en los meses siguientes del alumbramiento, en la depresión post-parto, en el éxito de la lactancia, en el sistema nervioso del bebé en los meses próximo, en su perspectiva de ver el mundo. 
El bebé sale del útero de su madre para conectarse con un mundo extraño, tratemos de que momento trascendental sea lo mas saludable posible. La vida comienza en este momento, de aquí dependerá el futuro del nuevo ser. Aquí comienza la oportunidad de cambiar el mundo. 




5/3/14

El conflicto de las Etiquetas.

Peggy O´Mara dijo: "La forma en que hablamos a nuestros hijos se convierte en su voz interior" con esto estoy totalmente de acuerdo y también creo que la forma en que nos referimos, tiene peso sobre ellos. Como padres, tenemos poder en relación a la forma en que ellos se verán a sí mismos durante toda su vida. Si entendemos esto como la gran responsabilidad que conlleva, podremos despojarnos de etiquetar a los niños.Esta pésima costumbre de decir lo que nuestros hijos "Son" dependiendo de cada situación. ¿Por qué no arriesgamos tanto a que caiga en nuestros hijos el peso de nuestras palabras? Estamos cortando su potencial cada vez que los tachamos de llorones, envidiosos, flojos, malcriados, etc. ellos llegan a creer que lo que estamos diciéndoles es lo que de verdad son. 

"El etiquetar a un/a niño/a, le va a llevar a comportarse según los dictámenes de esa etiqueta que va a terminar asumiendo, pero no sólo eso, sino que además, el resto de adultos y niñ@s que vayan conociéndole y sepan de la existencia de esa “etiqueta”, serán susceptibles de caer en el sesgo de observar únicamente, los comportamientos que éste emita y que sean descriptivos de ella.Sin embargo  las etiquetas positivas, es decir, aquellas que aprueban en demasía algún aspecto, habilidad o conducta del niño/a, también pueden afectarle, pues el otorgarle una etiqueta positiva puede resultar un “arma de doble filo”, ya que podrían darse situaciones ante las cuales el niñ@ no pudiera responder según las exigencias de esa etiqueta que le ha sido asignada, llegando a experimentar incluso miedo a no estar a la altura de lo que se espera,  lo que puede ocasionarle también estrés y ansiedad, viéndose afectada,en consencuencia, su autoestima. Dentro de este tipo de etiquetas positivas, podríamos mencionar ejemplos  como “ eres el / la mejor”; “siempre sacas sobresalientes”; “nunca fallas en nada”; etc."

Tomemos conciencia, los niños son seres que están en constante aprendizaje, sobre todo de nosotros sus padres, no dañemos su alma inocente catalogando negativamente su sentir. 
Su hijo no es un llorón, no es flojo, no es envidioso ni malcriado. Su hijo es un niño, con todo lo que eso implica, y está viviendo sus etapas, dejelo vivirlas tranquilamente y respetandolo.
Su hijo es un ser con un alma limpia, no la contamine. Deje que él aprenda y construya su propia personalidad. Guíelo. Ayudelo a sacar su potencial sembrando en él seguridad, confianza y una sana autoestima.
Acéptelo en sus momentos difíciles, así como le gustaría que lo hicieran con usted. Sea cuidadoso con sus palabras (aún cuando él no esté presente) y por el bien de su hijo no lo etiquete. Ah y por favor, tampoco lo haga con el mio.



3/3/14

Berrinches.

Cuando nuestros hijos van creciendo viene consigo el sentimiento de "independencia", cuando el niño va tomando conciencia de que es un individuo aparte de su madre. Muchos padres temen por esta etapa ya que son incapaces de abordar este tema con empatía. 

El problema aquí no es el niño, sino la falta de información sobre las etapas evolutivas que va viviendo. Debemos entender que el niño tiene un lenguaje limitado y su forma de comunicarnos su malestar es llorando. Esto no quiere decir que están tratando de tomarnos el pelo, al contrario están pidiendo nuestra ayuda para algo que los aqueja. Están tratando de mostrar su autonomía y esto tampoco quiere decir que se creen mas listos que nosotros. Y es que muchas veces sentimos que están atacando nuestro ego de padres, queremos dejar claro que somo fuertes y que mandamos. Nos da miedo igualarnos con los niños, con su amor, su inocencia, su pureza. ¿Se dan cuenta? Queremos que acaten ciegamente nuestras ordenes pero eso sí, que en el mundo sepan defenderse, protestar, manifestar sus necesidades. ¿Así como? 
Nos da tanto miedo que sean unos tiranos, "si eso hace ahorita, imaginate cuando crezca" pero ¿como puede alguien que ha sido tratado con amor y respeto ser un malcriado? Cuando un niño esta pasando por un berrinche, la esta pasando realmente mal y es su derecho ser escuchado y tratado con respeto. Los golpes, gritos y humillaciones solo desarrollan conductas negativas, sentimientos de hostilidad y depresión, que puede manisfestarse en muchas situaciones de su vida cotidiana. 

"Si le enseñas a obedecer siempre y a no conseguir lo que quiere, estarás propiciando una personalidad sumisa. Si le permites decidir, negociar y elegir, estarás propiciando una personalidad asertiva."

Cuando se está pasando por una rabieta lo mejor es ponerse a la altura del niño, tocarle el hombro o abrazarlo (si él lo permite y si no es posible sólo permanecer cerca de él), mostrar empatía("entiendo que estés enojado porque...") y ofrecer alguna alternativa ("Ahorita no podemos llegar al columpio pero que te parece si...") 
A veces golpearan o gritaran pero debemos ser pacientes y si nos están agrediendo dialogar y explicar que que entendemos su malestar pero que no dejaremos que nos peguen, pero siempre desde el lado de la tolerancia y el respeto.
Todos sabemos cuales son las situaciones que los pongan en peligro, a veces en nuestro afán por poner limites "nos pasamos" en negar cosas. Detengámonos a pensar un momento si lo que no esta pidiendo es verdaderamente peligroso o inflexible o si podemos llegar a un acuerdo ("Ahora estoy apresurada para ir al parque, pero que te parece si salimos a dar una vuelta 15 minutos y regresamos para terminar la cena") Por supuesto que no los dejaremos hacer lo que ellos quieran, simplemente guiaremos. Seremos democráticos.



No existe una formula mágica para lograr de forma respetuosa el berrinche, lo que existe es la voluntad y la compasión. Lo que podemos hacer es comprender que es una etapa sana del desarrollo de los niños. Mirar los ojos de nuestro hijo y darnos cuenta que esta sufriendo de verdad, que lo esta pasando mal y que nos necesita porque somos todo para ellos, su verdad y su guía y así como afrontemos estos "problemas" ellos aprenderán a hacerlo de la misma forma. Cortemos con esa raíz de impaciencia, indiferencia y rabia que venimos cargando de generaciones pasadas y que lo único que nos han dejado es un mundo egocéntrico. 

Permanezcamos a su lado en su mal momento y así demostraremos que nuestro amor es incondicional. Mientras mas pequeñitos, mas nos necesitan. Conforme vayan creciendo y desarrollen su lenguaje, adoptaran habilidades para resolver sus problemas. Son tiempos difíciles, es cierto, pero gritando, castigando y golpeando solo lograremos que sea peor. Hagamos que este tiempo sea mas fácil para ellos como para nosotros, practicar la paciencia nos dará mas tranquilidad cuando venga la rabieta y nuestros hijos sabrán que siempre estaremos ahí para ayudarlos y escucharlos. Poco a poco sus berrinches irán disminuyendo, conforme avance su lenguaje y su seguridad de ser aceptados y comprendidos por sus padres.


2/3/14

Lactancia Nocturna

Todo parece maravilloso cuando tenemos a nuestros recién nacidos en brazos pero ¿Que pasa cuando transcurren las 3 primeras noches? Los constantes despertares nocturnos.
El cansancio del puerperio de por sí es agotante sumado a las exigencias de alimentación de nuestros bebés, nos lleva a la desesperación. Pero definitivamente todo esto seria mas fácil si comprendiéramos el por qué de esas necesidades. 
Para empezar es bueno dejar claro que no despiertan para molestarnos, sino que el tamaño de su estomago es pequeño por lo tanto la leche se digiere rápido y en poco tiempo necesita comer otra ves.



Muchas madres piensan que su leche "no llena al bebé"  y por eso son tan constantes sus despertares, esto es totalmente un mito. Pienso que el grave problema que nos aqueja  como padres es la desinformación. El hecho de que quieran comer tan seguido, como ya dije es el tamaño del estomago, pero también hay otro punto importante que recalcar: La leche materna es 100% digerible, contrariamente que la leche de formula, esta ultima es mas pesada para el estomago del bebé y tarda mas en digerirse; es como comerse un trozo de carne o comerse un plato de vegetales. Los dos nos han llenado, la diferencia está en los nutrientes y claro en la digestión. Probablemente nos dará hambre mas rápido con los vegetales pero estamos obteniendo lo mejor para nuestro cuerpo.

Alimentarse muchas veces, evita hipoglucemias y les mantiene hidratados y las tomas se hacen durante todo el día y toda la noche.
También es importante saber que la composición de la leche cambia al rededor de las 4 de la mañana donde alcanza un nivel alto de triptófano y melatonina. Estas dos sustancias ayudan a inducir y conciliar el sueño con mayor facilidad. Este sistema de regulacion en las composiciones de la leche ayuda a que el bebé vaya regulando sus  ritmos circarianos (estos ritmos regulan las funciones fisiológicas del organismo para que sigan un ciclo regular que se repite cada 24 horas, y que coincide con los estado de sueño y vigilia) y así lograr su maduración.

Una forma para llevar a cabo estas tomas nocturnas es durmiendo con nuestro bebé, así casi ni nos daremos cuenta cuando nos despertamos y el bebé no tendrá necesidad de llorar por la noche, ya que estaremos cerca de él y la atención será rápida, lo que no le dará tiempo de despertar pro completo a él tampoco.

La lactancia nocturna es tan importante como la diurna, no neguemos este derecho a nuestros bebés. Recordemos que amamantar no sólo alimenta, amamantar también nutre de amor.



1/3/14

Crianza en Brazos

En nuestra cultura existe una falsa creencia que llevar a los bebés en brazos los malcría y/o los hará mas dependientes. Pero ¿Que hay de las muchas tribus que siguen esta practica ancestral? Se ha demostrado que en estas comunidades existen niños mas felices, mas conectados con sus madres, menos rebeldes y menos faltos de amor. ¿Por qué? Porque los bebés piden estar en brazos no para enfadarnos, sino porque sus cuerpos lo piden, por la sencilla razón de que los brazos estimulan su desarrollo.
Este contacto físico tan cercano los hace sentirse amados y valorados, seguros y contenidos en un regazo tranquilo. Todo esto refuerza su autoestima.
Se sabe también, que un bebe acunado y tenido mucho tiempo en brazos desarrolla muchas mas conexiones entre las neuronas del cerebro (sinapsis) que otro que no. Gracias a las neurociencias se puede confirmar que los niños necesitan del contacto con los otros a través del afecto, la ternura, la caricia, la mirada, la palabra o el gesto, para crecer y desarrollarse plenamente.

Existen trastornos psicológicos, entre ellos el Borderline, el Trastorno de Limite de la Personalidad, (TLP) (aparece en el Manual Diagnóstico de los Trastornos Mentales publicado por la Asociación americana de Psiquiatría recién en 1980.)  Que aqueja a personas que por alguna razón sufrieron interferencias en su desarrollo infantil y no han podido evolucionar, se sienten inseguras de sí mismas y del mundo que los rodea. El TLP es una defensa psicológica contra dos problemas: la falta de amor y seguridad emocional durante la infancia y la hostilidad, individualismo y desconfianza, vigentes en la sociedad actual.

UNICEF creó un método llamado "Madre Canguro", un programa que anima a las madres a abrazar a sus bebés prematuros contra su pecho, revelándose útil el contacto directo con el cuerpo de la madre para estabilizar la temperatura corporal de los bebés, mantener su ritmo cardiaco estable y ayudar en la respiración. 
Mireille Tribié, especialista de salud de UNICEF en Haití, explica lo siguiente: “Podría decirse que el método madre canguro ofrece la mayoría de los beneficios para los bebés prematuros y los lactantes con un bajo peso al nacer, que experimentan una temperatura, ritmo cardíaco y respiratorio más normalizados, un mayor aumento de peso y una menor incidencia de la infección del tracto respiratorio. El método madre canguro también ayuda a mejorar los patrones de sueño de los lactantes y promueve un amamantamiento frecuente."

Bueno aquí dejé evidencia científica, pero me resulta triste tener que dar explicaciones para algo que es tan natural. Que somos guiados por un sistema y una cultura que esta a favor de la exclusión y el egocentrismo; y sigamos creyendo que eso es lo que el mundo necesita para ser mejor. ¿Como podría esto hacer un mundo mas humano cuando lo único que busca es el individualismo? Hagamos caso a nuestra naturaleza humana, que es amor puro; a nuestro instinto, que es cercanía y proximidad. No se qué decir... Abramos los ojos o abramos los corazones.