Como contraparte a la dieta estándar actual donde las harinas, los lácteos, azúcar, grasas hidrogenadas, carnes procesadas/congeladas y productos de fábrica fritos y cargados de químicos, se presenta la otra cara de la moneda con el hecho de que una dieta a base de alimentos crudos y vivos, seleccionados cuidadosamente, fomenta la salud física, mental y espiritual de los niños;
NUTRICION
La situación anterior no es privativa de nuestros niños, sino que afecta a los Estados Unidos, al Reino Unido y a otros países, que también reconocen que la dieta estandar falta de nutrientes, afecta negativamente a la niñez y lamentan que en mayor o menor medida, ahora el destete de los bebés es a base de refrescos y papas fritas.
Desde siempre, del nacimiento hasta los seis meses de edad, lo mejor es la leche materna de forma exclusiva. Pasada esta edad, además de la leche materna, se recomienda la introducción de alimentos sólidos, principalmente frutas además de verduras cocidas, como la comida más perfecta para los niños.
Los niños requieren para su crecimiento de las frutas y las verduras, principalmente las de color verde, que suministran grandes cantidades de clorofila, proteínas, vitaminas, minerales, enzimas y antioxidantes. Las verduras de hojas verdes ayudan a concentrar los nutrientes y cuando se preparan en la cocina, se liberan sus nutrientes, se rompe la celulosa y su absorción se mejora sustancialmente. Para todas las edades, las hojas verdes son la clave para una salud excelente.
La mejor alimentación que puede ofrecerse a los niños, son las frutas, verduras, nueces y semillas, junto con miel de abeja, aceite de oliva, además de aguacates y plátanos que proporcionan nutrientes y grasas benéficas. También se puede añadir a la dieta diaria, los lácteos como yogurt, queso fresco y huevos.
La dieta familiar, comienza por la preparación en casa de las verduras como base de la alimentación, y además de los guisados y sopas preparadas en casa, se debe incluir siempre algo crudo y verde en cada comida. Las frutas, semillas y nueces, deben ofrecerse a libre demanda y tenerlas siempre sobre la mesa, porque los niños siempre se sienten atraídos por sus colores brillantes y apetecibles formas.
Las necesidades nutricionales de la familia y en especial de los niños, deben ser planeadas cuidadosamente y nunca deben dejarse a cargo de los fabricantes y comerciantes de alimentos cuyas prioridades no son la salud y florecimiento de nuestros bebés y niños, sino ganar dinero a costa de lo que sea.
Texto Original en:
Revista Mundo Natural http://www.revistamundonatural.com/noticia.cfm?n=487#ixzz30Kp8LXmY